Vistas de página en total

domingo, 21 de noviembre de 2010

Amores que matan


No creo que mi reflexión hoy vaya muy de acuerdo con los temas que habéis dado. Pero ya sabéis que no siempre puedo adecuarme a las propuestas. Para empezar les cambio el refrán. Es que pensando en el tema de la violencia, a mí se me vino a la cabeza otro que me sirve muy bien para lo que quiero expresar. “no le hagas a los demás lo que no te gustaría que te hagan a ti”.
Reflexionando sobre la violencia, me doy cuenta que no creo que existan diferentes violencias. Me explico: no creo que haya solo violencia de género y que esta en sí misma sea el peor mal. Entiendo que la historia ha hecho que tengamos que hacer discriminación positiva para defender a tantas mujeres víctimas de la violencia de género, pero no quisiera que esto nos haga perder de vista que lo malo, la violencia, no lleva apellidos. Violencia de género, violencia infantil, violencia a los ancianos, violencias en las aulas etc. Por lo que primero deberíamos pensar en erradicar la violencia lleve el apellido que lleve. De ahí el refrán, si ninguno de nosotros le hiciera a su prójimo lo que no le gustaría recibir viviríamos todos en paz.
Aun así no dejo de darme cuenta que lograr esto no es fácil.
Condeno toda forma de violencia y pienso que ésta solo se puede erradicar desde la educación en igualdad.
Desde la educación porque pienso vivimos en una sociedad violenta, que está tan acostumbrada a recibir y repartir violencia, que en el día a día ni se percata de lo que está pasando.
La violencia no tiene porque ser solamente física, la violencia puede estar inserta en cada uno de nuestros actos.
Desde quien no responde un saludo, a quien ejerce sobre otro una critica malsana, está ejerciendo violencia y visto de este modo no son solamente las mujeres las victimas, sino toda la sociedad que no sabiendo reconocer la violencia la recibe y la ejerce a diario, sorprendiéndose luego cuando alguien que no asume vivir en sociedad, le quita la vida a otra persona solamente por pensar diferente, por no acatar, o por cualquier razonamiento ilógico que se quiera hacer, ya que quitar una vida nunca tiene lógica.
Pero ¿no quita la vida igual un/una maltratador psicológico que día a día intenta convencerte de lo poco que vales y lo mal que lo haces todo? esto también existe y no solamente dirigido a las mujeres, en realidad, el maltrato de esta forma es mas común en los niños que a su vez se defienden generando violencia.
Si, la pescadilla que se muerde la cola, por eso erradiquemos la violencia, ¿cómo? para empezar no poniéndole apellidos, dejándola sola, porque todas sus maneras son reprochables, educando en la igualdad, y la igualdad real también tiene muchas aristas, no es la ley igual para todos, ya que no hay un todo, sino un individuo sobre la que se va a ejercer.
Por eso la igualdad debe ser que cada quien cuente con las herramientas que le hagan falta para desarrollarse como persona, sin necesitar ejercer la violencia de pasar sobre otra, de desestimar ni excluir a nadie, ni de competir en competencias vanas, que a algunos enriquecen vilmente y a otros sólo les hacen sentir más sus "diferencias".
Que este año el día de la violencia de género se emplee en hablar y hablar sobre la igualdad, sólo la igualdad sin tapujos y sin límites puede hacer desaparecer aunque sea muy de a poco, la violencia que siempre se engendra en las diferencias.


Alicia Gaona. Tertulia Entrelineas